Cómo se programa en estos lenguajes. Editores, trabajar en local, colgar archivos...
Antes de lanzarnos en las consideraciones teóricas relativas a la programación, resultaría interesante aclarar algunas dudas que puede presentarse referentes a cómo escribir y publicar páginas dinámicas.
Para escribir una página dinámica podemos hacerlo del mismo modo que si lo hiciésemos en HTML. En realidad, el código está constituido exclusivamente de texto y lo único que tenemos que hacer por lo tanto es guardar el archivo texto con una extensión que pueda ser reconocida posteriormente por el servidor. Así, por ejemplo, las páginas de ASP son reconocidas por su extensión "asp" del mismo modo que las de PHP lo son a partir de extensiones "php" u otras en las que se especifica la versión utilizada ("php3" o "php4"). En muchos casos el servidor nos permite seleccionar qué tipo de extensión debe ser reconocida para un determinado lenguaje por lo que estas extensiones no están totalmente generalizadas aunque son sin duda las más utilizadas.
Dado que se trata únicamente de archivos texto, es posible crear páginas dinámicas a partir del Bloc de Notas o cualquier otro procesador de texto plano (Texto ASCII, sin códigos raros como los que pone MS Word). También podemos utilizar los editores clásicos empleados para el HTML aunque en este caso, estamos obligados a trabajar en modo editar y no en modo gráfico. Esta última posibilidad resulta tanto menos aconsejable cuanto que la mayoría de estos editores no están preparados para la programación en estos lenguajes y algunos de ellos (Frontpage en sus versiones anteriores a la 2000, sin ir más lejos) están dispuestos a borrar aquellos textos que no es capaz de interpretar.
Existen sin embargo algunos editores de HTML que si ofrecen ventajas al editar scripts. Tal es el caso del Homesite que muestra coloraciones diferentes en función de la sintaxis del programa lo cual permite una lectura más fácil. Además, hay otra serie de editores más pensados para páginas dinámicas en general o para algún lenguaje en particular.
Una vez el programa realizado, el paso inmediato es el de ejecutarlo. Como ya ha sido explicado, los lenguajes de lado servidor ejecutan los scripts en el propio servidor y envían el resultado en forma de código HTML al cliente (navegador). Resulta obvio que para probar entonces el programa es necesario colgar por FTP los archivos que lo componen en el servidor y hacer la petición desde el navegador. En principio, no es por tanto posible el trabajar offline a partir de archivos alojados en el disco duro tal y como hacíamos con el HTML. Esto en realidad no es completamente cierto ya que existe la posibilidad de convertir nuestro propio ordenador en servidor web personal de manera que podemos trabajar en local sin necesidad de estar conectados continuamente lo cual podría representar un problema para aquellos que tengan que pagar una factura telefónica al estar conectados por modem además de resultar más juicioso puesto que un servidor no es el sitio ideal para hacer nuestros pinitos en un lenguaje que no controlamos suficientemente. Bucles infinitos, variables no cerradas y otra serie de irregularidades pueden estar consumiendo recursos importantes en perjuicio de los usuarios que estén accediendo a otras paginas albergadas por este servidor.
Como puede verse, la forma de operar resulta casi análoga a lo que hacíamos para nuestro sitio estático y no presenta ninguna complicación aparente. Cabe destacar que, como ya se ha dicho anteriormente, para poder servirse de estos lenguajes de lado servidor, es imprescindible que el servidor esté preparado para leer las páginas programadas en un lenguaje no comprendido por el navegador. Dichos servidores son en su gran mayoría de pago lo cual añade ciertas limitaciones económicas al proyecto.
Para escribir una página dinámica podemos hacerlo del mismo modo que si lo hiciésemos en HTML. En realidad, el código está constituido exclusivamente de texto y lo único que tenemos que hacer por lo tanto es guardar el archivo texto con una extensión que pueda ser reconocida posteriormente por el servidor. Así, por ejemplo, las páginas de ASP son reconocidas por su extensión "asp" del mismo modo que las de PHP lo son a partir de extensiones "php" u otras en las que se especifica la versión utilizada ("php3" o "php4"). En muchos casos el servidor nos permite seleccionar qué tipo de extensión debe ser reconocida para un determinado lenguaje por lo que estas extensiones no están totalmente generalizadas aunque son sin duda las más utilizadas.
Dado que se trata únicamente de archivos texto, es posible crear páginas dinámicas a partir del Bloc de Notas o cualquier otro procesador de texto plano (Texto ASCII, sin códigos raros como los que pone MS Word). También podemos utilizar los editores clásicos empleados para el HTML aunque en este caso, estamos obligados a trabajar en modo editar y no en modo gráfico. Esta última posibilidad resulta tanto menos aconsejable cuanto que la mayoría de estos editores no están preparados para la programación en estos lenguajes y algunos de ellos (Frontpage en sus versiones anteriores a la 2000, sin ir más lejos) están dispuestos a borrar aquellos textos que no es capaz de interpretar.
Existe un artículo en desarrolloweb que explica de manera más detallada el mundo de los editores de páginas |
Existen sin embargo algunos editores de HTML que si ofrecen ventajas al editar scripts. Tal es el caso del Homesite que muestra coloraciones diferentes en función de la sintaxis del programa lo cual permite una lectura más fácil. Además, hay otra serie de editores más pensados para páginas dinámicas en general o para algún lenguaje en particular.
Una vez el programa realizado, el paso inmediato es el de ejecutarlo. Como ya ha sido explicado, los lenguajes de lado servidor ejecutan los scripts en el propio servidor y envían el resultado en forma de código HTML al cliente (navegador). Resulta obvio que para probar entonces el programa es necesario colgar por FTP los archivos que lo componen en el servidor y hacer la petición desde el navegador. En principio, no es por tanto posible el trabajar offline a partir de archivos alojados en el disco duro tal y como hacíamos con el HTML. Esto en realidad no es completamente cierto ya que existe la posibilidad de convertir nuestro propio ordenador en servidor web personal de manera que podemos trabajar en local sin necesidad de estar conectados continuamente lo cual podría representar un problema para aquellos que tengan que pagar una factura telefónica al estar conectados por modem además de resultar más juicioso puesto que un servidor no es el sitio ideal para hacer nuestros pinitos en un lenguaje que no controlamos suficientemente. Bucles infinitos, variables no cerradas y otra serie de irregularidades pueden estar consumiendo recursos importantes en perjuicio de los usuarios que estén accediendo a otras paginas albergadas por este servidor.
Como puede verse, la forma de operar resulta casi análoga a lo que hacíamos para nuestro sitio estático y no presenta ninguna complicación aparente. Cabe destacar que, como ya se ha dicho anteriormente, para poder servirse de estos lenguajes de lado servidor, es imprescindible que el servidor esté preparado para leer las páginas programadas en un lenguaje no comprendido por el navegador. Dichos servidores son en su gran mayoría de pago lo cual añade ciertas limitaciones económicas al proyecto.
Rubén Alvarez
Rubén es doctor en química y programador principalmente en sus ratos libres con...