Las personas que trabajamos por cuenta propia tenemos que aprender a desconectar de nuestro trabajo.
Es fácil que nuestro trabajo nos robe tiempo de nuestra vida privada, lo que es más complicado es justo lo opuesto, sobretodo para los que trabajamos por cuenta propia. Conseguir desconectar de nuestra actividad laboral es algo necesario, imprescindible. Y puede ser complicado especialmente si trabajamos en casa.
Yo ya tengo comprobado que los atracones de trabajo derivan siempre en situaciones difíciles en las que nuestro rendimiento baja bastante. Después de varios días trabajando más de la cuenta es fácil entrar en una dinámica de desgaste que a la postre nos hace menos productivos y puede incluso minar nuestra salud. Entonces no queda más remedio que tomarse un descanso necesario y casi involuntario que nos hace perder horas de la jornada o días enteros de productividad.
Pero es que, incluso sin necesidad de excederse en el trabajo, desconectar por completo de nuestra actividad es algo imprescindible para la salud física y mental.
Algunos consejos para poder desconectar fácilmente son:
Realizar tareas totalmente diferentes en nuestro ocio. Está comprobado que cuando trabajamos, por ejemplo, en Internet al final no queda espacio para el ocio en la Red. Pero es que tampoco es recomendable que después de trabajar de cara a una pantalla, continuemos nuestro ocio delante del ordenador, jugando a juegos por ejemplo. Yo también añadiría que no es recomendable seguir de cara a una pantalla, viendo por ejemplo la televisión. Ojo con la vista, que se desgasta bastante.
Tener ambientes de trabajo y ocio bien diferenciados. También, a ser posible, es recomendable realizar las tareas de trabajo en una sala o ambiente distinto que el que tenemos para laborar. Esto es de vital importancia para los que trabajamos en casa.
Para nuestro ocio es importante elegir actividades que realmente nos gusten, de las que podamos disfrutar plenamente. En general, tratar de aprovechar al máximo esos momentos de relax y focalizarnos por completo en ellos.
Terminar de trabajar un poco antes de empezar una actividad lúdica. Los que tenemos un negocio propio muchas veces pensamos demasiado en él. Para desconectar efectivamente y divertirnos sin pensar en nuestro trabajo es bueno dejar de trabajar un rato antes de quedar con los amigos o familia.
Si nos cuesta dejar de pensar en el trabajo, es interesante también compartir con otras personas tu tiempo libre. Disfrutar al máximo de la familia o los amigos y dedicarles nuestra atención y focalizarnos en sus inquietudes o problemas es algo que también nos ayudará a desconectar. Si no tienes la suerte de contar con un nutrido grupo de amigos o familia, apúntate a una actividad donde compartas con otras personas inquietudes distintas que las laborales.
No ser tan sedentarios. Si trabajamos en el ordenador y nos pasamos la mayor parte de nuestro tiempo sentados, es importante moverse en nuestros ratos libres. No quedarse quietos y salir a pasear, hacer deporte o cualquier cosa que nos permita mover el esqueleto. Esto redundará en la mejora de nuestra salud.
Tener amigos que nos faciliten tratar temas distintos al trabajo también es algo de interés que nos ayudará a desconectar. Conozco muchas personas que no saben hablar de otra cosa que no sea su trabajo y creo que eso no es saludable ni atractivo para conocer y disfrutar de otras personas.
Siempre tenemos que acordarnos de "trabajar para vivir", en lugar de "vivir para trabajar". No te conviertas en un adicto al trabajo, que no te hará feliz.
Yo ya tengo comprobado que los atracones de trabajo derivan siempre en situaciones difíciles en las que nuestro rendimiento baja bastante. Después de varios días trabajando más de la cuenta es fácil entrar en una dinámica de desgaste que a la postre nos hace menos productivos y puede incluso minar nuestra salud. Entonces no queda más remedio que tomarse un descanso necesario y casi involuntario que nos hace perder horas de la jornada o días enteros de productividad.
Pero es que, incluso sin necesidad de excederse en el trabajo, desconectar por completo de nuestra actividad es algo imprescindible para la salud física y mental.
Algunos consejos para poder desconectar fácilmente son:
Realizar tareas totalmente diferentes en nuestro ocio. Está comprobado que cuando trabajamos, por ejemplo, en Internet al final no queda espacio para el ocio en la Red. Pero es que tampoco es recomendable que después de trabajar de cara a una pantalla, continuemos nuestro ocio delante del ordenador, jugando a juegos por ejemplo. Yo también añadiría que no es recomendable seguir de cara a una pantalla, viendo por ejemplo la televisión. Ojo con la vista, que se desgasta bastante.
Tener ambientes de trabajo y ocio bien diferenciados. También, a ser posible, es recomendable realizar las tareas de trabajo en una sala o ambiente distinto que el que tenemos para laborar. Esto es de vital importancia para los que trabajamos en casa.
Para nuestro ocio es importante elegir actividades que realmente nos gusten, de las que podamos disfrutar plenamente. En general, tratar de aprovechar al máximo esos momentos de relax y focalizarnos por completo en ellos.
Terminar de trabajar un poco antes de empezar una actividad lúdica. Los que tenemos un negocio propio muchas veces pensamos demasiado en él. Para desconectar efectivamente y divertirnos sin pensar en nuestro trabajo es bueno dejar de trabajar un rato antes de quedar con los amigos o familia.
Si nos cuesta dejar de pensar en el trabajo, es interesante también compartir con otras personas tu tiempo libre. Disfrutar al máximo de la familia o los amigos y dedicarles nuestra atención y focalizarnos en sus inquietudes o problemas es algo que también nos ayudará a desconectar. Si no tienes la suerte de contar con un nutrido grupo de amigos o familia, apúntate a una actividad donde compartas con otras personas inquietudes distintas que las laborales.
No ser tan sedentarios. Si trabajamos en el ordenador y nos pasamos la mayor parte de nuestro tiempo sentados, es importante moverse en nuestros ratos libres. No quedarse quietos y salir a pasear, hacer deporte o cualquier cosa que nos permita mover el esqueleto. Esto redundará en la mejora de nuestra salud.
Tener amigos que nos faciliten tratar temas distintos al trabajo también es algo de interés que nos ayudará a desconectar. Conozco muchas personas que no saben hablar de otra cosa que no sea su trabajo y creo que eso no es saludable ni atractivo para conocer y disfrutar de otras personas.
Siempre tenemos que acordarnos de "trabajar para vivir", en lugar de "vivir para trabajar". No te conviertas en un adicto al trabajo, que no te hará feliz.
Juliana Monteiro Lazaro
Directora de CriarWeb.com